Pibas, una antología de historietistas argentinas contemporáneas, es un libro que cristaliza una actitud, un movimiento y una verdad: la presencia, enorme, vasta y diversa de autoras en la historieta local. Una existencia que va muchísimo más allá del best-seller (Maitena), la aparición en eventos Crack Bang Boom o, como bien dicen sus compiladoras, el colectivo In bocca al Lupo (Daniela Arias, Valeria Reynoso y Romina Fretes), ideas rancias a destronar. Por ejemplo, "que se asuma que nuestros temas se acotan a la menstruación, la maternidad y los zapatos. Y que somos seres sensibles y, por lo tanto, nuestras historietas han de estar infundidas de ese amor que sentimos (ja). Esa norma insulta nuestra capacidad creativa."
Pibas, editado por Hotel de las Ideas, y "Pibas", la muestra en el Centro Cultural Recoleta que desde hoy suma diez nombres a los 24 que hay en el libro, cristalizan cosas que suceden en la escena local y en festivales independientes del medio (aunque no hace tanto: durante años, estos eventos tuvieron una sola mesa dedicada a las autoras). Eso que latía fuerte ha surgido en los últimos años como signo de los tiempos, sobre todo en múltiples ferias y festivales donde In bocca. juega un papel clave.
Aclaran las In bocca al Lupo que Pibas es, "un recorte, y este es un mundo en expansión". Y eso queda en evidencia irrefutable al ver las páginas la antología, donde nadie puede sostener que la historieta sigue siendo algo solo para hombres, un mito demasiado enraizado que la agrupación sostiene.
¿Hay referentes para este libro o incluso para In bocca al Lupo que correspondan a alguna escuela, movimiento o generación de la historieta local? "No creemos", responden y agregan "Consumimos historieta argentina y también de a poco, gracias al trabajo de rescate que se realiza ( Chicks on Comics y su muestra en Proa, Mariela Acevedo con su proyecto actual), empezamos a ver cosas que no conocíamos hechas por mujeres. Pero un medio expulsivo no puede generarnos sentido de pertenencia. Suponemos que ahora somos nuestro propio movimiento, que no tiene que ver con nada más que la voluntad de conquistar espacios y abrir lugar para quienes todavía no se animan y que eso tenga solidez para quienes vengan después."
"¿Cuántas niñas habrán dejado de leer cosas que les interesaba por esa restricción de género? Varias autoras del libro e incluso nosotras mismas vimos la posibilidad de hacer esto cuando la existencia de alguna mujer nos advirtió que era viable." se preguntan y responden con esta antología. El libro nació como fanzine para el MOCCA Fest neoyorkino, con tan solo 28 ejemplares, y desde aquel abril del 2018 fue creciendo hasta lograr su forma actual donde nombres ya publicados como Sole Otero y Muriel Frega conviven con otros más feroces y menos establecidos como Sukermercado, Martina Bazán o Maelitha.
Esa variedad permite una multiplicidad de propuestas, desde historietas contra el patriarcado a experiencias sexuales autobiográficas, pasando entre muchas opciones por simple lisergia o un adorable amor de conejos: "Queríamos que resalte la diversidad de propuestas y que cada una se sienta representada. Un detalle que las aúna es que todas son autoras integrales. Teníamos la intención de romper el mito que hay una historieta hecha por 'mujeres', como si el campo de nuestra creación estuviera restringido a la experiencia dictada por la biología."
PARA AGENDAR
Desde hoy el trabajo de In bocca al Lupo se podrá ver en Centro Cultural Recoleta de forma gratuita, y el libro Pibas se presenta mañana, a las 20.30, en la cuarta edición del Festival de Autoras de Historietas ¡Vamos las pibas! (Feliz, Av. Córdoba 3271, Buenos Aires).
Fuente LA NACION
